Un café con Dios
Mi refugio En medio de la prueba, correré a mi refugio que es Dios. David huyo a las cuevas de Adulam (Refugio), estaba preocupado y atribulado, lo atacaban con palabras de muerte y los asechaban para derrotarlo. Pienso en eso y solo puedo decir ayúdeme maestro, en usted esta nuestra esperanza y solo espero su voluntad. Esto me hace meditar en los salmos 57 y 142. Me siento sin fuerzas, triste, en estos momentos en mi mente están esos pensamientos que me dicen: No lo vas a lograr, no vales nada, has fallado muchas veces, como crees que Dios te puedo escuchar. Pero cierro mis ojos y siento que existe una voz que me dice: Tranquilo todo pasara, yo estoy a tu lado. A mi mente viene ese texto que se encuentra en el libro de Josué 1:9. En este texto habla de valentía, de esfuerzo, de no tener temor. Eso es algo muy fundamental, pero me llama la atención cuando dice Jehová tu Dios estará con a tu lado a donde quiera que vayas. Puedo ser valiente, puedo esforzarme y no t